“Un extraño monstruo se despierta”. Cuento infantil sobre el volcán de La Palma

Consuelo Santamaría es la autora del libro “Un extraño monstruo se despierta”, editado recientemente por Cáritas Diocesana. Se trata de un cuento infantil que narra el dolor que provocó el volcán de Cumbre Vieja en la población palmera.

Santamaría es doctora en Filosofía y Ciencias de la Educación, Máster en Counselling y en Humanización de la intervención social. Asimismo, posee el Postgrado en Duelo y es autora de varios libros. En la actualidad forma parte del equipo de profesionales del Centro de Humanización de la Salud de los Religiosos Camilos de Tres Cantos, Madrid.

Después de que el volcán de Tajogaite entrase en erupción devastando todo lo que encontraba a su paso, la Unidad Móvil de Intervención en Crisis de los Religiosos Camilos se desplazó a la Isla Bonita para prestar acompañamiento emocional y orientación psicológica, de forma gratuita, a todas las personas afectadas por esta catástrofe natural.

El objetivo de esta unidad fue formar a personas voluntarias en intervención en crisis y en duelo para poder abrir un centro de escucha. Tras dos años de formación, hoy día, este centro es una realidad.

Durante este tiempo, Consuelo Santamaría ha estado encargada del acompañamiento a niños y adolescentes. Concretamente, en el colegio de educación infantil y primaria (CEIP) Mayantigo, de Los Llanos de Aridane, pudo recoger los testimonios de los niños y niñas de 2º de Primaria que vivieron la dura experiencia de ver cómo el volcán explotaba muy cerca de sus casas, teniendo que abandonar los hogares y, en algunos casos, perdiendo sus viviendas y objetos personales más queridos.

De esta experiencia surgió el libro “Un extraño monstruo se despierta”. Según expresó Santamaría, a los niños les resulta mucho más fácil expresar sus miedos y emociones proyectando en otros lo que sienten. “Quise inventar los personajes de Juanito y Ana para que los niños se identificaran con ellos. Asimismo, el monstruo que se despierta se llama Vulcanoso. Es un monstruo que ruge, que da mucho miedo, que nos despierta por la noche. Juanito está muy triste porque ya no tiene sus coches, sus juguetes y Ana no tiene sus muñecas. Además, se sienten mal porque están durmiendo en una habitación con un montón de gente”.

Para Santamaría, el libro es el resultado de un camino sanador. “A los niños les pareció una idea preciosa. Se entusiasmaron mucho. Es asombroso el bien que hace poder poner palabras a sus miedos. Poco a poco hemos ido recorriendo un camino terapéutico que fue vaciando por dentro todas sus inquietudes relativas al desastre hasta que consiguieron tener paz. Una paz que también es el final de la historia porque los niños consiguen hacer las paces con el volcán”.

Santamaría también pudo acompañar en La Palma a adolescentes que compartieron con ella sus miedos y preocupaciones. “Lo que más me impactó fue descubrir que estos adolescentes no estaban preocupados por ellos mismos, sino por sus seres queridos. Recuerdo un chico de 16 años que me dijo: mis abuelos están como la lava. Negros, sin vida, duros y rasposos. Me sobrecogió esta afirmación y le pregunté cómo eran antes. Me dijo: antes del volcán eran alegres y estaban llenos de color. No sé cómo ayudarles. Este chico expresó a la perfección lo que es una depresión. Verlo todo negro, oscuro. Estas experiencias para mí no tienen precio. Me siento una mujer muy afortunada por haber sido instrumento de ayuda a estos niños y adolescentes tan dañados por el dolor”.

2023-09-08T08:52:46+00:00